Cuando nos sacamos el carné de conducir nuestras dos principales preocupaciones son, primero, aprobar el examen teórico y segundo superar si es posible a la primera, el examen práctico. Y ninguna de las dos son tarea fácil y más, cuando contamos con la presión de que se trata de un proyecto que supone un esfuerzo para la economía del hogar y que muchas no contamos con el tiempo necesario para dedicarle a ello. Lo que muchas veces no tenemos tan en mente es ese otro examen que también tenemos la obligación de pasar: el examen psicotécnico.
Esta revisión a la que nos debemos someter consta de diferentes pruebas que lo que buscan es valorar las condiciones físicas y psíquicas que tiene el futuro conductor para poder conducir un coche. Las pruebas más comunes que se suelen realizar son, por ejemplo, una revisión oftalmológica para analizar la capacidad visual, audiometría para conocer si no se cuenta con algún problema auditivo, pruebas de movilidad de coordinación.

Examen médico:
Reconocimiento de vista: Para evaluar tu capacidad visual te harán el famoso test Snellen, en el que debes identificar las letras de un cartel colocado a una distancia de unos 5 ó 6 metros. También te preguntarán si usas lentillas o gafas y cuándo ha sido tu última visita al oftalmólogo.
Reconocimiento del estado de la audición: Para la prueba auditiva te dirigirán en una habitación insonorizada para que avises al recibir una señal sonora.
Reconocimiento del estado general de la salud: Consiste en un chequeo general en el que te toman la tensión, te hacen preguntas básicas sobre tu historial clínico para saber si tienes alguna enfermedad, si te han operado alguna vez, si tienes antecedentes familiares de diabetes, dolencias cardíacas, etc.

Examen de coordinación:
Es la prueba de la que se puede pensar que es la más complicada, sobre todo para las personas mayores, pero nada más lejos de la realidad. En un sencillo aparato, compuesto por un monitor y dos palancas, cuyo programa informático sirve para comprobar la percepción del movimiento y la coordinación viso-motriz para saber cómo son tus reflejos.

Valoración psicotécnica:
Consiste en una serie de preguntas genéricas que te hará el facultativo para un breve reconocimiento psicológico, para evaluar el estado mental y descartar posibles trastornos de conducta. Si has estado de baja por depresión o ansiedad, si acudes regularmente al psicólogo o psiquiatra y por qué, si tomas pastillas para este tipo de enfermedades…

Una vez que la DGT recibe tu certificado médico, éste será válido durante 6 meses. Si, es este periodo de tiempo no has obtenido el carnet, tendrás que volver a hacer el psicotécnico. De igual modo, deberás repetir el mismo procedimiento con la renovación del carnet de conducir.