Para la prueba auditiva te dirigirán en una habitación insonorizada para que avises al recibir una señal sonora.
Se explora el umbral auditivo para cada frecuencia (lo que se denomina, frecuencia liminar), es decir, «lo mínimo que oye una persona» en cada frecuencia. Sirve para la valoración cuantitativa y cualitativa de la audición.
Se considera una audición normal cuando el paciente oye en todas las frecuencias exploradas entre los 0 y 20-30dB.
Por lo que respecta a la agudeza visual, mediante el examen de optotipos normalizados, tomando la visión de ambos ojos por separado y en conjunto.